Alicia María Gómez Villarejo, jefa de fiscalización del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología, destacó el arduo quehacer de esa institución en el aseguramiento de la inspección sanitaria en los centros de aislamiento, hospitales, el sector del turismo, así como la venta de productos alimenticios y no alimenticios.
“Todavía existen medidas que no tienen entendimiento por parte de la población y los administrativos. Tenemos un despliegue de inspectores que exigen el cumplimiento de los dispuesto. En la última semana se han impuesto 139 multas, de ellas 55 multas por el uso incorrecto o ausencia del nasobuco”.
Varias de estas acciones también incluyen a la zona industrial 2, con los medios de transporte provenientes de otras provincias, así como operativos sanitarios en centros de alimentación colectiva”.
Con relación al curso escolar, se resaltó la importancia del cumplimiento estricto de todas medidas dispuestas como la pesquisa en la entrada de la escuela y el distanciamiento.
“No se puede violar nada, porque es una brecha que nos puede afectar. No podemos permitir que un niño llegue a una escuela y provoque un contagio. Al inicio del curso se han detectado algunas indisciplinas, que se han ido corrigiendo”.
“Todas las indisciplinas que involucran la higiene de los establecimientos y el incumplimiento de normas tributan a la propagación de la enfermedad, por ejemplo, en algunos bares particulares entraban más personas de los que estaban permitidos”.