Un proyecto de conjunto entre la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE) y su homóloga en Cuba comenzará en breve, en la provincia de Cienfuegos, como una experiencia piloto en la capacitación para el empleo, el cual se extenderá luego a toda la Isla.

Jorge Luis Cala Ledesma, presidente de la Asociación Nacional del Ciego en Cuba, explicó a la prensa que el objetivo es formar a cada persona con discapacidad en el puesto de trabajo, a fin de lograr una preparación competente para el mercado laboral.

Unos 30 mil 800 cubanos viven con discapacidad visual, dijo, y han sido afectados -como todo el pueblo- por el bloqueo económico y financiero impuesto por el gobierno de Estados Unidos a la nación caribeña.

Indicó el directivo que para las personas con discapacidad visual es imprescindible tener buenas habilidades para lograr independencia y asumir un puesto laboral que lo sustente, además que le permita su realización personal, de ahí resulta fundamental el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación, a la telefonía móvil y a la informática.

Explicó que incluso desarrollar pericias en ese tipo de comunicación resulta vital para el empleo, para el estudio y para la propia calidad de vida, sin embargo hay un grupo de aplicaciones que desde Cuba no se pueden descargar, incluyendo aquellas asociadas a la inteligencia artificial.

También el bloqueo afecta en la adquisición de papel Braille, de las máquinas Braille y de otras tecnologías, como medio de apoyo desde los bastones, los relojes parlantes, las ayudas ópticas, las prótesis auditivas para las personas con sordo ceguera, todo ello un gran apoyo, pero no se comercializan, ni se producen en el país y su principal procedencia es el mercado norteamericano, agregó.

Con los cursos que impartirán desde la Fundación ONCE se ayudará a atenuar las dificultades de esas personas, al menos para que reciban la preparación y los habilite de cara a asumir un nuevo empleo.

José Antonio González Horta, presidente de la ANCI en el territorio cienfueguero, informó a la Agencia Cubana de Noticias que se han organizado diferentes cursos, desde la informática, gastronomía, de artes manuales, entre otros, a tono con las posibilidades reales de los asociados.

Dijo que en esta provincia existen unas mil 200 personas con discapacidad visual asociados a la ANCI, no todos en edad laboral, pero dentro de los que ya son trabajadores, existen profesionales con grados de máster en ciencias, profesores de universidades, de preparación física, técnicos medios, y creadores entre otros.

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